A veces, montar una cena especial para los más pequeños es más fácil de lo que parece, solo nos hace falta un poco de imaginación para crear formas divertidas y podremos hacer que coman lo que nosotros queramos.
Ingredientes.
- 8 mini panecillos de hamburguesa.
- 400 gramos de carne picada de pollo.
- 8 lonchas de queso.
- Cebolla picada.
- 1 diente de ajo.
- 1 huevo.
- Miga de pan.
- 75 ml de leche.
- Perejil fresco picado.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Mahonesa.
Elaboración.
Pelamos y picamos un trozo de cebolla muy finamente, al igual que el ajo.
Disponemos la carne en un bol junto con el ajo, la cebolla y el huevo y mezclamos bien. Le incorporamos también la miga de un trozo de pan remojada en leche, no vamos a necesitar demasiado porque la carne picada de pollo es muy tierna. Por último, espolvoreamos una buena cantidad de perejil picado y reservamos en la nevera –tapado con papel film- durante media hora para que coja cuerpo.
Calentamos un hilo de aceite en una sartén y mientras, vamos formando las hamburguesas y las pasamos por harina antes de freírlas.
Ponemos sobre la tabla las lonchas de queso y con la punta de un cuchillo recortamos unos ojos y una boca.
Calentamos los panecillos, untamos algo de mahonesa y montamos las hamburguesas para llevarlas a la mesa.
Servir caliente.
La carne de pollo picada es muy suave y por eso la hemos elegido, para facilitar la digestión de las noches, pero las podemos hacer con ternera, cerdo, un mix o con legumbres. A todos les gustará.
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